Ni bien sonaron los dos primeros acordes de la canción, me di cuenta de que me había olvidado la letra, por completo. Y faltaban cuatro compases para que tuviera que comenzar a cantar cuando noté que no sólo me había olvidado la letra, sino que no sabía en qué banda estaba tocando o dónde era el concierto, ni siquiera tenía claro quién diablos era yo, sin embargo estaba allí, subido a un escenario gigantesco, vestido de rojo y negro, parado delante de un micrófono -leí Shure SM58- y con la mente en blanco. Estaba jugado, así que apenas escuché que la batería marcaba la entrada a la estrofa, solté la voz libremente. Salió límpida, profunda, potente, de tenore leggero -supuse-, pero sobre ella iba lo primero que pasaba por mi cabeza: palabras o frases en inglés, porque me pareció que ése era el idioma apropiado. Intentaba que la melodía se adecuara lo mejor posible a los matices armónicos, lo cual era bastante difícil, ya que no conocía el tema. Jamás me había dado por vencido frente a una contingencia, no iba a ser esta noche la primera vez:
I know something about opening windows and doors.
I know how to move quietly to creep across creaky wooden floors.
No quería ni pensar en mis
compañeros de grupo, temí lo peor, el escarnio, que me bajasen a las patadas, no sé, sentía que las miradas de todos me seguían como láseres y que estaban atravesándome, así que di media vuelta para quedar de espaldas a la platea, pero me encontré con el bajista que justo venía hacia mí, era calvo, tenía una expresión de fascinación y alegría, asentía, eso me animó, seguí adelante:
Slipping the clippers
through the telephone wires.
The sense of isolation
inspires.
Inspires me.
Las personas del público se me antojaron extranjeras, muy extranjeras quiero decir, pongamos por caso que fueran japoneses o vietnamitas, lo cierto es que se veían como una masa compacta de infinitos ojos rasgados y bocas ansiosas que querían absorberme, devorarme. No hablaban, pero juro que pedían más, mucho más, todo, y yo se lo iba a dar:
Intruder comes and leaves his mark.
Leaves his mark.
Leaves his mark.
Cuando terminó la canción, el estadio -literalmente- estalló en gritos y aplausos, entendí que se trataba del final del
concierto, así que saludé agitando las manos por encima de mi cabeza y salí por el costado izquierdo del escenario. Estaba oscuro. Bajé una escalera corta y empinada, al pie me esperaban varios periodistas que se acercaron a mí con aire solemne, uno de ellos me
preguntó si con Intruder sentía que por fin había
llegado a la cumbre de mi carrera como músico. Ofendido, le dije que no, que jamás se me ocurriría pensar en semejante estupidez, que para protegerme de mis propios juicios jactanciosos siempre cantaba cada canción como si fuera la primera vez que lo hacía, entonces -apurado y pidiendo disculpas- me alejé hacia el camerino, sin tener la menor idea de dónde quedaba.
Basado en la canción Intruder de Peter Gabriel, músico que en mi adolescencia me marcó el camino del arte.
Estimados amigos:
ResponderEliminarMuchas gracias por las visitas y comentarios para ‘Palabras exactas’.
No hay mucho para decir en esta ocasión, espero que les gusten estos experimentos literarios, para mí son como un gran descanso mientras sigo con la no… nov… nove, ya ni sé cómo se escribe.
Un fuerte abrazo.
Humberto.
Angustia, expectación, asombro, satisfacción, desconcierto. Lo que uno puede sentir cuando no sabe ni dónde está, ni quién es, ni qué está haciendo. Pero me gusta esa sensación de hacer algo que ya se hizo en tan repetidas ocasiones, pero con la pasión de la primera vez. Casi como escribir, casi como hacer el amor.
ResponderEliminarMe gustó mucho el experimento,Hum :))
Un beso!
Me alegra mucho que te haya gustado, Mayte, porque estoy en la búsqueda de algo que me desconcierte a mí, así puedo sorprenderme en el espacio más extraño de mi ser.
EliminarEs un relato que necesita cierta alineación (por qué no alienación) mental.
Un beso muy grande y muchas gracias.
Este y no otro es el fantôme que nos sigue en la sombra todos y cada uno de los instantes. Aprehendemos de manera portentosa que no somos NADA y por tanto, capaces de arrasar en un escenario hasta que la gloria nos cubre en el estreno...
ResponderEliminarLuego vienen las reposiciones y ya la cosa se complica o nos quedamos sin manager...
Que sí, que no, que nunca segundas partes fueron buenas, Humberto!
Besos abrazos
Somos nada y todo en un mismo momento, todo depende del momento en que se dispare el flash y nos capte desprevenidos, luego sabremos de qué lado pararnos.
EliminarPor cierto, me quedé sin manager, ¿tú no querrías...?
Muchos besos, mujer, que los abrazos ya quedan cortos.
Suele pasar con los grandes artistas consagrados, que hagan lo que hagan en un concierto, sus seguidores se lo perdonan todo, siempre y cuando el espectáculo estè asegurado, asi somos cuando enarbolamos banderas de fans.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
paco
Un punto de vista que me atrapó, Paco, pues tu visión me desconecta del texto propio y me mete de lleno en cómo impactan las letras en otros.
EliminarUn fuerte abrazo.
Pois é Dr. em neuropsicología, este texto hoje esta dificil. Mas afinal quem é o intruso? é o cantor ou é o relator? Eu penso que é o relator que está doente e devido a isso deixou entrar esse intruso. Aconselho a que ele vá ugentemente a uma consulta de psiconeurologia.
ResponderEliminarOlhe isto foi mais um desabafo rsrsrsrsrsrs.
Beijinhos Humberto
Acho que o intruso aqui é o escritor, Florzinha, nesse texto só o leitor vale, mas está difícil sim, um dos mais... obscuros.
EliminarBeijinhos, minha querida.
Depois você me conta ;)
Eliminarbjs
Melhor me conta você, esses escritos são mais interessantes quando eu nem participo... ou quase.
Eliminar"Vou te contar
EliminarOs olhos já não podem ver
Coisas que só o coração pode entender
Fundamental é mesmo o amor
É impossível ser feliz sozinho..."
TOM JOBIM.
O nosso querido Tom que agora virou aeroporto, para que as palavras dele voem pelo mundo todo...
EliminarEsta vez nos has puesto las cosas muyyyy dificiles, Humberto.
ResponderEliminarCreo que nos estás trasmitiendo muchos mensajes que se me escapan, me parece que todo fuera un sueño del personaje y nadie lo entendiera. Una pesadilla feliz o algo asi!
Un abrazo.
Fede.
Fede, claro que hay mensajes, pero lo importante es que no todos son míos, algunos sí, otros se comparten gracias a la conexión que se establece con el lector, pero están los que sólo encuentra el que lee... simplemente así.
EliminarUn fuerte abrazo, amigo.
Para mí, que no distingo mucho las fronteras entre la vigilia y el sueño, el percance que narrás es perfectamente posible, no importa en qué mundo sea. En cualquiera de ellos, siempre, alguna vez, nos sentimos inseguros, inexpertos, impostores... y también, geniales, únicos, amados.
ResponderEliminar(por ahí en el camarín estaba tu perro, tus anteojos, tu mujer, quién sabe...).
Un abrazo
Me encantó tu comentario, Betina, eso que comentás muestra que te has ubicado en el mejor lugar para leer un relato así.
EliminarClaro, amiga, mi perro, el perro del baterista y la esposa del japonés de la tercera fila.
Un fuerte abrazo.
Describes uno de ésos momentos en los cuales la magia se conjuga con la inspiración y el artista entrando en ésta catarsis creativa solo puede desear que haya quedado una buena grabación, o de lo contrario puede tan súbita y efímera instancia perderse entre los ecos alimentados por los grandes poetas o músicos de la borrachera. Los que escribieron en el aire. Los juglares itinirantes. Los grandes charlistas del café. Cuanto arte se ha perdido por no estar presente una grabadora.
ResponderEliminarTienes que saber de música, Carlos, ya que captas el instante exacto que sólo pueden contar aquellos que lograron esa mejor versión, la imposible, la que no se grabó. Después es todo, como bien dices, charla de café, anécdota de lo que pudo ser pero no.
EliminarLos escritos 'populares' me dejan muchos comentarios, estos, además, me hacen pensar que subí el texto correcto, para hoy y a esta hora, nada más.
Un fuerte abrazo, amigo.
TU INSPIRACIÓN ES MÁS QUE ROCK INÉDITO. FULL TEXTO. YEAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
ResponderEliminarEso, ReltiH, un buen rock and roll en Mi-La-Si y tocado en trío.
EliminarUn fuerte abrazo.
Genial Humberto, si no te preguntas nada es que estas muerto, arriba del escenario, siempre te preguntas que diablos hago aquí, Un abrazo cariñoso y portentoso!"
ResponderEliminarVeo que tienes experiencia en las tablas, Carmen, ¡tienes que contarme más, eh!
EliminarEsos abrazos tuyos son pura energía y cariño.
Muchas gracias.
es el escenario transforma la realidad vehementemente
ResponderEliminares el embrujo de un instante que se fija a la retina
por ese instante vale la pena cualquier rutina ordinaria
besos
Es una lástima que la mayor parte del tiempo estemos abajo del escenario, si bien eso es lo que nos permite llamarnos 'normales', o creer que lo somos.
EliminarUn beso, Elisa... y ¡feliz cumpleaños! Bueno, aquí con demora, en el face fue a tiempo ;)
Eres un escritor entretenido, que entretiene; porque a partir de una acción tan surrealista como tu "Intruder" consigues mantener la atención desde el principio.
ResponderEliminarSuerte en tus experimentos Humberto.
abrazos..
Spaghetti, cuánto hace que no te veía por aquí, es una gran alegría que hayas venido, pues muchas veces es a través del comentario que puedo devolver la visita, es que son muchos, ojalá lo comprendas.
EliminarMuchas gracias por lo que dices, pues entretener es una de los objetivos principales de un relato, sea a través del terror, el drama, la comicidad o el surrealismo, no debe dejar al lector indiferente.
Un fuerte abrazo.
Cuando hacemos una tarea (o en este caso el artista) tantas veces y repetidas veces, produce una sensación de hacerlo de memoria y la mente se desconecta totalmente... como cerrar una puerta y luego no recordar si la cerramos.
ResponderEliminarEn tu relato el desconcierto corre por parte del cantante... pero la gente solo puede ver el ídolo y no sus defectos.
Un beso,.. que siempre tengas ese ingenio vigente!
PD: gracias por la vista.
Cuando tenía 20 años quería ser una estrella del rock, hacer giras interminables, recibir aplausos y toda la parafernalia del espectáculo. Hoy pienso que si tuviera que repetir la misma canción durante meses, y emocionar en cada interpretación, no lo conseguiría.
EliminarLa literatura, por más que llegues a la cumbre, te ofrece una vida más tranquila, a pesar de las presentaciones, los contratos y lo demás.
Muchas gracias por tu comentario, me hiciste... hablar.
Un beso grande.
Humberto .... me encantó tu relato.....hago teatro y el dire llegada la hora de salir a escena, siempre nos dice..va a salir todo bien....el público no se da cuenta si se han olvidado una parte del libreto, todo pasa, entre aplausos jajajja
ResponderEliminarMe he imaginado verte en verdad cantando y estaría bien que además de escribir hicieras teatro, letras no te han de faltar.....escribo muchos libretos para mis escenas tu lo harías de maravillasssss ...besossss
Pues te imaginas bien, ya que alguna vez me dediqué a cantar, es un largo tema y no va a interesar a nadie, pero llegué a tocar para 20 mil personas en un estadio de fútbol, esto fue hace varios años.
EliminarMe quedo con tu propuesta final, a escribir libretos, entonces.
Un beso muy grande.
Pues digamos que se te apoderó de ti ese musico que a lo mejor llevas por dentro para viajar a otro mundo paralelo e interpretar tu rola favorita como si fueras el protagonista.
ResponderEliminarun abrazo
carlos.
Uff esto de la table y mis dedos... que se apoderó de ti y no como lo escribi arriba
EliminarEste maravilloso mundo de las letras nos permite ser (tenga fundamento real o no) lo que se nos venga en ganas, es una perogrullada, pero no deja de ser cierto. Los problemas comienzan cuando la gente cree que fuimos todo lo que inventamos, pero aún peor es cuando lo creemos nosotros.
EliminarUn fuerte abrazo, amigo, muchas gracias por tu comentario.
Me encanta por lo surreal. Me hace pensar estar en un contexto equivocado, pero en el cual hay que actuar, y no remediar el equívoco, porque de nada valdría la pena. UN abrazo, Humberto. Carlos
ResponderEliminarTal vez no en el escenario de un estadio, pero sí en el escenario de la vida, ¿a quién no se le ocurrió la frase 'qué mierda hago aquí'?
EliminarEso sí, como bien lo indicas, siempre para adelante.
Un gran abrazo.
Yo conozco una reina de la improvisación, no hay torbellino capaz de dejarla en blanco, pero le falta inteligencia emocional ¡o una buena voz!
ResponderEliminarUn beso
No sé bien por qué, pero me has hecho dar ganas de conocer a esa reina. Para mayores datos, mándame las señas por mail ;)
EliminarUn beso grande.
Pues si que estaba pasado de ácido, jejeje
ResponderEliminarAbrazo
No se me había ocurrido, pero puede que tengas razón, a mí me has dejado patitieso.
EliminarUn abrazo, Lucho.
Ah!! Siempre un paso adelante, has adelantado mi comentario en la respuesta a Carlos. Iba a decirte que al leerte pensé en el escenario de la vida, acaso no representamos todos los días situaciones en la que por diferente motivos estamos y en realidad no sabemos qué hacemos ahí o peor, querríamos salir corriendo y es entonces donde ponemos en práctica esa improvisación innata para salir airosos de la situación. Y al final volvemos al triste lugar de la soledad, el mismo sitio a donde los “grandes” vuelven cuando se terminan los aplausos y el gentío desaparece.
ResponderEliminarCariños….
Es probable que yo haya bosquejado lo de 'escenario de la vida', pero tu comentario es tan completo que agregar algo es como querer quedarse con la última palabra, innecesario.
EliminarY si digo esto es para no dejarte sin, como mínimo, el agradecimiento por tu lectura atenta.
Un beso grande.
El relato parece sacado del mundo onírico. Ese "no recordar" y, a pesar de todo, salir airoso, triunfante... A mí me ha sonado a radiografía de lo que hacen algunos artistas con seguimiento multitudinario: hagan lo que hagan y digan lo que digan, bien está, por el solo hecho de ser ellos.
ResponderEliminarMe ha gustado, Humberto.
Un abrazo y ánimo con esa novela.
Es cierto, parece onírico, pero me parece que tiene mucho más que ver con lo que dices después, también le agrego algún mensaje encriptado, pero eso ya es por puro placer mío.
EliminarMuchas gracias por tus deseos, Isabel.
Un beso grande.
Pues para no recordar nada parece que todo le fue a la perfección.
ResponderEliminarMás éxito, sin duda, que de haber recordado:)
Saludos
¿Y no suele pasar?
EliminarRecuerdo que cuando tuve que dar mi último examen en la facultad no sabía nada, pero en el momento de estar frente a los profesores, frente a sus preguntas, yo hablaba sin parar de cada tema, y parece que sabía sin saberlo... o me regalaron la nota.
Muchas gracias, TriniReina.
Cuando la memoria nos falla, actúa la imaginación.
ResponderEliminarSaludos desde Valencia.
¡Mientras no nos falle también la imaginación!
EliminarUn abrazo, Ricardo.
Julio Iglesias sale deste cuerpo !!!
ResponderEliminarIncompetente y famoso que suerte deseado por tantos tontos!
Hay pesadillas peores, Tendrias que consultar al bueno doctor Freud ...
Besos nocturnos...
Ni me lo nombres a Freud que ya tuve que estudiar toda su obra hace años, lo prefiero a Lacan, creo que debes saber de quién hablo.
Eliminar¿Julio Iglesias es así? Voy a tener que escucharlo... no, algo me dice que mejor no.
Un beso, Manouche.
peter gabriel tambien marco mi adolescencia aun rexuerdo su concierto en Las Ventas y este relato me parece alucinante es jisto lo que necesitaba para empezar de nuevo.... te lo tomo preatado para leerlo varias veces ... un abrazo¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarQué alegría me da leer esto que dices, Sara. Me encantaba cuando se disfrazaba para cantar con Genesis, sin dudas que fue el creador del rock teatro.
EliminarTómalo por el tiempo que quieras.
Un abrazo grande.
Qué momento! Olvidarlo todo para hacerlo tan bien. Quizá es que era necesario olvidarlo todo para hacerlo así de bien.
ResponderEliminarchao!
Tal vez no había otra salida, bueno, sí, bajarse del escenario y pedir disculpas, ¿pero qué es peor?
EliminarUn abrazo y muchas gracias.
Me encantò esta forma de incursionar en el àmbito de la "supervivencia del yo". Somos seres maravillosos cuando el instinto se interpone y se recrea solo...
ResponderEliminarUn escrito que se hizo arte en tus plumas y viceversa ...
Excelente!, me gustò mucho Humberto.
Un abrazo grande.
Muchas gracias, Genessis, hace tanto que vienes por aquí que debería contarte el 'detrás de escena' de este cuento, no podrías creerlo, tal vez lo haga en privado.
EliminarUn fuerte abrazo, amiga.
el "detrás de escena"......parece tiene sus recovecos...., dicen que las mujeres somos curiosas, pero en este caso me pusiste a prueba....jajja
EliminarYo creo que detrás de cada escrito -bueno, regular y/o ficción- siempre hay una dosis o más de cosas de no creer y que le ha sucedido, en menor o mayor grado a uno mismo.
Va otro abrazo para vos Humberto.
Has salido de la situación mejor que una reina, querida amiga. Y encima me has hecho reír, más abrazos.
EliminarTodo le salio perfecto, para estar en un lapsus mental y no recordar nada,sin embargo la intuición hizo que saliese mejor que si hubiese recordado todo.Saludos cordiales.
ResponderEliminarUn lector habló de ácidos, cada vez estoy tomando más seriamente su opinión, Esteban.
EliminarUn fuerte abrazo y muchas gracias.
En el teatro como en la vida el que sabe improvisar gana (dicen que como actor el que eso hace, es bueno)
ResponderEliminarDespués...coge buena fama y échate a dormir...
El público es un monstruo de un millón de cabezas pero sin cerebro...(OjO al dato, jajaja)
En otros ámbitos, los escritores, o los que los emulamos, siempre buscamos sorprender, en tu caso, Humberto, eso sabes hacerlo de primera...
Un beso enorme.
Es que ayer comencé a sentir que tenía que subir un nuevo relato... así que tuve que improvisar ;)
EliminarUn beso, Marián, muchas gracias.
Cuando te enfrentas a una situación así, afloran conocimientos y habilidades que nunca creíamos tener. Eso... o te quedas paralizado. Ahí se demuestra la capacidad de reacción de la persona.
ResponderEliminarMe ha gustado, Dib.
Salu2 espontáneos.
Con un amigo habíamos creado un blog colectivo que se llamaba algo así como 'diga lo que le parezca', aparecían cosas muy interesantes, pero luego se volvió MUY delirante y no prosperó.
EliminarUn abrazo, Diego.
A eso le llamo yo, tener tablas...
ResponderEliminarAl principio que angustia da esa ausencia de memoria pero a medida que nos adentramos se va disfrutando y lo bien que se desenvolvió con los periodista...Lo dicho tiene tablas.
Un abrazo Humberto.
Bueno, a veces los periodistas son medio... lentos, al menos aquí donde vivo, nunca saben repreguntar o se quedan fríos ante la primer bravuconada.
EliminarPero él tiene tablas, sin dudas.
Un fuerte abrazo, Bertha.
Eres un genio. Esa inventiva me fascina; me fasnina tu capacidad de producir historias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Francisco, también cuento con amigos muy amables como tú, a qué negarlo...
EliminarUn fuerte abrazo.
A veces las cosas improvisadas son las que mejores resultados ofrecen porque uno no espera demasiado de ellas y simplemente las deja hacer. Un besote.
ResponderEliminarNi me lo digas, una vez probé hacer una comida con lo único que había en la alacena y la nevera, ¿quieres saber cómo salió la improvisación? No, mejor no,
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Un beso grande.
El encanto de lo irrepetible. La otra noche escuchaba a un actor decir algo como "en plena temporada hacíamos 2 o 3 funciones por día" y a su vez intentaba convencer a la audiencia de su fervor, su entusiasmo. Yo opté por no creerle. No sé porqué al leer tu cuento me acordé de Justin Bieber y las noticias sobre sus variadas adicciones. Tal vez cuando se mezclan la juventud, la falta de talento con la maquina de triturar ídolos, la droga es el único refugio. En ese orden de cosas, parece que Los Wachiturros van a cantar en Londres. Casi me provocó asombro la noticia. Abrazo!
ResponderEliminarEs que Carlitos Tévez abrió todo un mercado en Inglaterra, te lo aseguro, pero... ¿cómo decirlo? Tendrías que evaluar por tu cuenta cómo consideran lo que hacen, los ingleses entienden esa movida como si se tratara de un fenómeno antropológico primitivo. Yo también me interesé en el tema.
EliminarCoincidencia, pensé también en Bieber,
Un abrazo, Ato.
Bueno, soy adoptado, tenemos una edad similar, mi viejo anduvo por Brazil..(siempre con Z) los dos somos hetero - You got the brains and I got the looks Abrazo a mi Brother in Arms!
EliminarTodo bien, Ato, yo te perdono casi todo (recordarás lo que ha dado en llamarse 'el asunto del brazo detrás de la silla y el cuchillo veloz'), pero Brasil viene de 'brasa', por el color rojo del Pau Brasil, así que lo de la Z ya es capricho de jovato, ¡por favor! ;)
EliminarPeor escapó el mago de mi última historia.
ResponderEliminarBuen relato.
Un abrazo
Ah, ahora tengo que leerlo, me dejaste con la duda, hoy o mañana paso por allá.
EliminarMuchas gracias y un abrazo, Antorelo.
Me ha pasado. No sobre un escenario. Comencé a hablar de un tema sobre el cual debí haberme informado previamente. Mientras las primeras palabras salieron sin ton ni son había una parte del cerebro que intentaba sin resultado rascar del fondo de la olla algún conocimiento que podía haber quedado. No había tanta gente, digamos siete u ocho. No sé si es peor o mejor. Se sienten las miradas que inhiben más, por si hiciera falta. No se me ocurrió cantar y menos en inglés.
ResponderEliminarSiempre me sorprendes, estimado
Un gran abrazo
Yo fui profesor universitario por casi 20 años, también daba seminarios, congresos, esas cosas. Lo peor era cuando tenías un grupo de pocas personas, pues allí se amplifica todo, las miradas, los suspiros, los errores. Por suerte, siempre fui bueno de verso, sumado a que hablaba (casi siempre, je) de lo que sabía.
EliminarGracias por tu anécdota que trajo también la mía.
Un abrazo fuerte, Rick.
Hola Humberto .. Y para cuando el próximo concierto ? Por que de teloneros irán U2 , jajajaja muy bueno tú relato , besos de flor .
ResponderEliminar¿U2 de teloneros? Déjame pensarlo, no sé si llegan al nivel ;)
EliminarUn beso grande, Flor.
¡Plas plas plas! ¡Bravísimo! Me encantan los relatos que me dejan descolocada.
ResponderEliminarA veces las cosas que menos se piensan son las que más triunfan, porque no hay nada más natural que la espontaneidad de dejarse llevar.
No sabes lo importante que sería que todos entendiéramos que la vida se vive mejor de esa forma: espontáneamente.
EliminarUn beso, Rita.
Jajajaj, que bueno !, otro relato con dosis de tensión y cierta paranoia... Se pasa muy mal cuando nos traiciona la mente y nos quedamos en blanco, y encima de un escenario puede ser mortal, pero una buena improvisación puede llegar a superar cualquier expectativa por la pureza de la naturalidad y la espontaneidad. Y lo de encontrar el camerino es lo de menos, es cuestión de ir probando jejejj. Un abrazo, Humberto !!!
ResponderEliminarNo quiero imaginarme dónde terminó esa noche, esperemos que en algún momento haya recuperado la conciencia de saber quién era, si no...
EliminarMuchas gracias, querido Bosón, un cálido abrazo.
Muy real, igual si la hubiese ensayado mil veces, al público no le hubiese gustado. Nunca se sabe dónde está el éxito auténtico. Que no es otro que el que da el público espontáneamente.
ResponderEliminarBicos.
Muy cierto, Ohma. En un nivel reducido, como lo es un blog, puedo constatarlo continuamente. Escribes un relato que te parece superlogrado, único, y no llegas a recibir ni un cuarto de las respuestas que imaginabas; y luego subes uno de esos textitos cursis de 3 al cuarto y tienes un aluvión de felicitaciones. Su Majestad el Público, lo llaman, por suerte aún no caí en eso, pero nunca diría de esta agua no he de beber.
EliminarBiquiños, querida amiga.
Siempre he pensado que estar subido en un escenario y poder hacer vibrar a una gran masa solo con tu voz o tus movimientos debe ser una sensación muy cercana a la de un dios. Lástima que el sueño se convirtió en pesadilla y el protagonista quedó convertido en un involuntario intruso.
ResponderEliminarMe llamó la atención la imagen, parecen glóbulos rojos con capacidad de besar.
Un abrazo con beso. :)
No me quiero poner filosófico, Ishtar, pero me parece que siempre somos intrusos de un espectáculo que otro montó. Así que tal vez sea lo normal.
EliminarLa imagen es la portada de un disco que se llama 'Scratch my back' del músico homenajeado en esta entrada.
Un beso grande, amiga.
Excelente. Pero en este caso mi elogio es acto reflejo: cualquier referencia al incomparable PG (desde la foto con los pétalos rojos hasta la velada alusión a ese bajista calvo, quién otro que el fantástico Tony Levin) ya me pre-condiciona el juicio para el lado del entusiasmo más absoluto.
ResponderEliminarAbrazo, HD.
Me pone muy contento que te hayas dado cuenta del pequeño guiño del bajista, eso es lo que llamo 'vibrar en la misma nota'.
EliminarMuchas gracias, Rob.
Un abrazo.
Menos mal que siempre hay quien nos da cuartelillo (como el bajista calvo)!
ResponderEliminarIntrusos... A veces tengo la sensación de ser una intrusa en mi propia vida.
Besos intrusos!
;)
¿Hay alguna forma de no sentirse así? Pero a mí no me parece nada mal, prefiero eso a sentirme competente pero aburrido.
EliminarBesos de los que tú quieras, Edurne.
Que lograda historia.
ResponderEliminarPodria ser algo como Memento, que el personaje no recuerde su carrera musical, su incorporación a esa banda. Puede que en algun momento se haya tirado al público, y que este no lo haya recibido, causando un accidente.
O una alteración de tiempo espacio, estilo de las historias de Philpip Dick.
Me encantó tu referencia a 'Lay your hands on me', creo que es a propósito, ¿no? Si no, sería demasiada coincidencia.
EliminarPor cierto, cómo extraño los cuentos de Dick, en realidad extraño aquella época en la que la ciencia ficción todavía me sorprendía... en fin.
Un abrazo, Demiurgo.
Humber:
ResponderEliminarTus relatos pueden gustar mucho o pueden parecer complicados pero siempre tienen la impronta de tu talento, eso que te hace diferente a todos. Eres una persona con valentía y MUYYY personal.
Creo que intrusos es lo que terminamos siendo cuando no cumplimos con nuestro destino y esperamos que los demás, la gente o los periodista, nos dirigen la vida.
Un beso grande maestro.
Besazos.
También pueden no gustar nada, je.
EliminarDejo lo de mi talento en tu boca, pero con él o no, nunca dejaría de escribir lo que me gusta o lo que tengo ganas de hacer en ese momento por ganar comentarios, seguidores o lo que fuere. Si algún día consigo editar en las grandes ligas, te contaré cómo sigue mi honor.
Un beso grande, Sabrina.
Humberto, la sensación que narras en tu relato cada uno puede hacerla suya cuando le toca hablar en público. Quedarse en blanco ante un gentío desconocido puede ser de los peores infiernos que puede sentir uno, quizás es exagerar, pero viene a cuento con este relato.
ResponderEliminarMuy original, como siempre, y admirable la forma que tienes de meternos en la historia y en el personaje.
Un fuerte abrazo.
No lo veo exagerado, puede ser un verdadero infierno. Y sí, Nicolás, puede trasladarse a cualquier situación en la que uno tenga que exponer algo y no lo recuerde o, peor, no lo sepa.
EliminarUn gran abrazo.
Has conseguido ponerme en el lugar del protagonista de tu relato y créeme me he agobiado.
ResponderEliminarAl final tuvo una salida airosa (típicas en tus escritos) aunque no supiera ni donde estaba.
Humberto un abrazo.
¡Y no te imaginas lo que me sucedía a mí cuando lo escribía!
EliminarNo creas que siempre sé lo que va a suceder al final, eh...
Un beso grande, Tracy.
El protagonista está en una situación tan vulnerable, que no importa lo que haga o lo que diga, como lector lo quieres proteger. Al final salió airoso.
ResponderEliminarUn beso
Es cierto, María Pilar, se lo ve vulnerable, pero jamás lo acepta, al contrario, se muestra cerrado, completo, soberbio.
EliminarUn beso, amiga.
Saludos Humberto, siendo neófito en estas lides "blogeras" le pedí consejo a una amiga común sobre sitios interesantes para alternar como si de una zona de copas se tratase y me remitió a este... creo..., por que ahora dudo haber acertado el camino pues me habló de "su" argentino y observo que vos sos "carioca"... aunque creo que lo comprendo, en el fondo todos somos un poquito argentinos, dicho lo cual diré que no me importaría ser también un poco "brasileiro".
EliminarLa trama del texto podría parecer un mal sueño si no fuera por que el protagonista sale airoso del trance y habiendo miles de ojos rasgados ¿atentos? no parece una pesadilla.
Algún hecho similar ha llegado a ocurrirme, no digo sentirme fuera de tiempo y de lugar, que también, sino que me confundan con quien pensaba que no era yo y dandole bola al asunto con esas tablas que da la vida, continuar con la farsa, en algún caso hasta hoy. La cuestión es: ¿quien somos en realidad?.
Un abrazo
Hola: Es así, Al, agradezco a tu amiga que te haya indicado este espacio, pero lo de su 'argentino' es un poco erróneo, no porque me moleste, sino porque... bueno, porque nací en Angra dos Reis, lo que tampoco me convierte en 'carioca', sino fluminense, como se nos llama a los que nacimos en el estado de Rio de Janeiro, pero no en la ciudad de Rio de Janeiro. Sutilezas que no tenés por qué saber, si hasta escuché que algún periodista llamaba a la selección brasileña como la 'selección carioca'.
EliminarMe gusta la idea de que hayas continuado con la farsa, lo que te coloca más del lado de las personas que admiro que de las que no, pues la farsa encierra más verdad que la verdad. Yo mismo querría ser un personaje de ficción, pero ni siquiera ese lujo puedo darme.
Llegaste para un texto atípico, ¿será una señal?
Sea como fuere, bienvenido.
Un abrazo.
Ok, fluminense pues, las cosas bien aprendidas nunca las olvido.
EliminarSalud.
Y es lo que tiene la música en directo, que nunca sabes lo que te reserva. Igual que tus relatos que blusean, jazzean, popean,... según los lees. Como siempre, fenomenal.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias, Nel. lo bueno de esto es que la admiración es mutua.
EliminarUn fuerte abrazo.
Que yo recuerde solo he tenido un problema parecido una vez. Asistía por primera vez a una comida, muy restrictiva de empresa, con la cúpula de dirección y ejecutivos veteranos. A media comida me dicen que todos esperaban que iba a decir, pues era la costumbre que el último tenía que tomar la palabra, agradecer la invitación y promocionarse. Me quedé atragantado y en blanco. Imaginar como iba mi mente mientras quitaba las espinas del pescado, montándome un discurso mentalmente. Os puedo contar que fui muy aplaudido y felicitado.
ResponderEliminarGracias por tu anécdota, Marcos, hay comentarios que valen porque traen un pedacito de cada uno de los que pasan por aquí.
EliminarMe imagino que sí, que lo habrás bordado con ese discurso.
Un fuerte abrazo.
Al menos, siempre es mejor darnos cuenta del momento en que nos vemos perdidos y ser capaces de seguir adelante, aunque los demás no sepan... o no quieran enterarse.
ResponderEliminarBesos apretaos.
Esto va más para el lado de 'no quieren enterarse'.
EliminarMuchas gracias, Yeste.
Un beso grande.
Bravo por la espontánea actuación. No sabía de esa canción de Peter Gabriel. O al menos, del título. Recuerdo que un día que se me metió en la cabeza una chavala difícil, resonaba en mi cerebro "Games without frontiers" también de Peter Gabriel. Ultimamente, lo tengo algo ignorado. Gracias por recordarme su existencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me imagino lo difícil que debió ser, pues si te sonaba una canción de Peter Gabriel indicaba que no estabas con una tía cualquiera.
EliminarYo no lo ignoro nunca, pero porque para mí fue el que me abrió el camino hacia el arte, hace muchos años, claro.
Un abrazo grande.
Excelente experimento Humberto, eso sí, debería arrancar leyéndolo desde el principio porque ya me olvidé como comenzaba jajaja. Excelente maestro
ResponderEliminarComenzaba así: 'ni bien sonaron los dos primeros acordes...', lo demás ya lo recordarás sobre la marcha, de eso se trata ;)
EliminarUn beso, Sil, muchas gracias.
Me he quedado alucinada. Sublime. No tengo nada que añadir, lo has dicho todo de manera abierta, velada, angustiosa y con suspense. Creo que estás al comienzo de maravillosa carrera como escritor mundialmente reconocido:-)
ResponderEliminarBravo por Intruder...
Bss
Que el Destino y las Musas te oigan, querida Katy.
EliminarMuchas gracias por ser siempre tan amable conmigo.
Un beso enorme.
Por un instante, sentí el peso del micrófono en mi mano y una bola gigante subiendo y bajando por mi garganta, y el aliento pegajoso e impaciente de una gran multitud sobre mi espalda.
ResponderEliminarAl final he suspirado aliviado. Pensé que no sería capaz de cantar tan bien.
Tus letras son exquisitas amigo, un abrazo.
Cantaste como e mejor, Jorge, te lo aseguro, yo estaba entre el público, como buen japonés que soy.
EliminarUn fuerte abrazo y muchas gracias por tus palabras.
¡Es maravilloso que contestes cada uno de los mensajes!!.No suele suceder en otros lugares y uno se pregunta¿Lo habrá leído?¡Sos un caballero!!!!Cariños Martha
ResponderEliminarCreo que es lo mínimo que uno puede hacer por una persona que se toma el trabajo de venir a leer y dejar su opinión, principalmente en una época en la que todo va tan rápido y nadie parece tener tiempo.
EliminarTe debo una visita, es que son muchos, Martha.
Un beso grande.
Cuando uno está en el escenario, los focos dan de lleno, no se ve nada, sólo se siente... y toca que actúe el ser intuitivo/creativo... por lo menos es cómo yo lo siento... es una sensación maravillosa -y llena de matices- que has descrito excelentemente.
ResponderEliminarEstupendo acompañamiento de tu relato con la canción de Peter Gabriel.
Mil gracias Humberto, besos mil
Bueno, quería decir también que conviene estar entrenado, y tener tablas y esas cosas, y así poder salir airoso...
EliminarEs que me dejas siempre sin palabras Humberto ; )
Donde pone "acompañamiento", quería decir "acompasamiento" (grrrr estas máquinas y su 'auto-corrección')... seguro que a Peter le encanta tu relato : )
EliminarEstoy de acuerdo, en arte lo racional puede estropear la obra. En mi caso sólo uso la parte racional para la corrección de estilo y los retoques finales, todo lo demás viene de la intuición/emoción.
EliminarMira que tanto acompasamiento como acompañamiento quedan bien, pero te entiendo, cuando uno quiere decir algo, necesita que la palabra sea la correcta.
Muchos besos y agradecimientos para ti.
En "mi realidad" tuve una experiencia irreal o desconocida, sentí que solo era voz y mi ego, que no había nada ni nadie a mi alrededor y percibí un bienestar incomparable al oír aplausos supe que debía regresar de nuevo en la otra realidad.
ResponderEliminarAl leer tu relato me doy cuenta que hubo nexos de unión: éxito, jactancia, miedo, y me hago preguntas como: ¿quién es la intrusa, ella o yo?...¿que ocurrió?.
Lo que más se puede asemejar en cuanto a extrañezas y pueda explicar algo, lo que intento transmitir, es: en una ocasión antes de tener un accidente de moto que fue inevitable, mi cuerpo estuvo disociado de mi mente hasta sentir el impacto, algo que sabemos es bastante común.
Es inevitable que me fascinen tus relatos y sea adicta a tus publicaciones.
Besos muchos ♥♥
tRamos
La semana pasada te dejé un largo comentario sobre lo que me dijiste acerca de 'Palabras exactas', quise contarte qué me pasaba a mí con tu devolución y tu duda, espero lo hayas leído, es como el comentario 310.
EliminarEsta vez sólo quiero decirte algo simple: Gracias por dejar volar tu imaginación conmigo. Pues no se trata de otra cosa, dejar que mi fantasía se contacte con la de otro y se una en un terreno que hasta a mí me sorprenda.
Muchos besos, claro que sí.
Sí lo leí, y entendí, por tanto aquí estoy de nuevo disfrutando con tranquilidad de tu imaginación que me lleva a pensar en los intrusos que pueden anidar dentro de nosotros mismos y que tal vez no llegues a percibir nunca o ¿tal vez si,?.
EliminarLa imaginación es un bien necesario¡¡¡
Besos
Si hay una palabra que no combina contigo es 'intrusa', al menos en mi vida...
EliminarEste relato que cuentas se ha dado en ciertas ocasiones real, y lo has plasmado con mucho ingenio. Grandes estrellas de la canción les ha ocurrido alguna vez; salir al escenario, y como se suele decir se han quedado en blanco. Pero como grandes estrellas que han sido, han sabido salir del trance, incluso con más éxito que aquello que ya tenían planificado. Los grandes como decimos al menos por aquí tienen que tener muchas tablas.
ResponderEliminarUn abrazo Humberto.
Es cierto, Rafa, creo que para muchos es un relato surrealista porque nunca estuvieron sobre las tablas y no imaginan que la realidad se trastoca allí arriba.
EliminarUn fuerte abrazo y muchas gracias.
Creo que muchos nos hemos visto en ocasiones similares, con o sin micrófono en mano. Quizás lo describes tan bien que el relato podría llevar nuestro propio como título. Gracias Humberto por hacerme ver que soy uno más. Un abrazo.
ResponderEliminarMe sorprendes, no veo la razón por la que no te consideraría uno más. Mira, en este mundo literario, todos somos parte de la gran fantasía que trasmite la literatura, sin embargo, en lo personal, siento que cada lector es uno más, pero también único, es paradójico, pero es así. Ojalá me entiendas.
EliminarUn fuerte abrazo.
Los momentos de inspiración existen pero mejor no fiarse. Buen relato
ResponderEliminar¿Quieres que te cuente? Uf, hay momentos que uno dice: estoy inspirado, voy a sentarme a escribir, y al rato estás borrando la página porque no salió ni una frase digna. No, claro que no hay que fiarse.
EliminarUn abrazo y gracias, Loreto.
Es como esa sensación de salir en ropa interior a la calle y hacer como si llevases el traje nuevo del emperador. Como ir a un examen con solo dos temas aprendidos y decidir que pregunten lo que preguntes eso es lo que contestarás. Al final el mundo es de los valientes, fue valiente y triunfó, con todo el miedo que debe dar no ser consciente ni de su propia existencia.
ResponderEliminarNo dejas de sorprenderme, eres muy genial Humberto
Besos
Tal vez no de manera tan extrema como en el relato, pero cuántas veces nos habremos animado a lo desconocido y salimos airosos, luego se disfruta más.
EliminarUn beso grande, Nurocas.
al principio pensé que el vocalista había sufrido un repentino e inesperado ataque de alzheimer, pero no; aquel proceder debe haber surgido de algo que se debe haber inyectado.
ResponderEliminarrecuerdo una entrevista de hace más de diez años, que le hicieron al gran maestro holandés jan timman donde refería que jugó drogado una partida internacional y que durante el juego se le vinieron a la mente increíbles variantes que podía plasmar sobre el tablero pero que una vez terminado este, dejó de recordarlos en el acto.
hay veces que los actos espontáneos surgen de manera artificial.
saludos.
Hay un neurólogo y psiquiatra que trata mucho estos temas de manera entretenida y poco académica, si hizo conocido en el libro Despertares, pero tiene otros mucho mejores, se llama Oliver Sacks.
EliminarUn abrazo, Draco.
Hoy al leerte vino a mi mente algo que había olvidado, tenía 18 años y no sé como convencieron a mi padre para que me dejara presentar para reina de carnaval de un club que frecuentábamos. Cuando me vi sobre el escenario las luces me llevaron a otra dimensión, el público eran puntitos negros pero logre hacer el pase y a la hora de la entrevista creí que no saldría ningún sonido, no se como lo hice pero la gente aplaudía y yo sólo sentía la necesidad de irme...
ResponderEliminarAl final fui en la carroza como miss simpatía, para una mujercita super-protegida fueron dos días deliciosos. Eso si: inicio y final, nunca más :)
Un abrazo muy grande
Muchas gracias por tu anécdota, Alondra, como dije antes, me da mucho placer que un relato tan... extraño traiga recuerdos gratos.
EliminarQuerría ver yo una foto de esa Miss Simpatía, pero creo que estoy pidiendo demasiado.
Un fuerte abrazo.
Amazing post.
ResponderEliminarThank you so much, Denise.
EliminarCheers!
Me recordaste a aquellos tiempos donde sobre un escenario me olvidaba las letras y debía seguir como fuera.
ResponderEliminarEl relato es genial y dice mucho más que las palabras.
Nos sigues sorprendiendo. Un abrazo.
Está lleno de guiños, es verdad, pero no pido que todos los descubran, ya casi lo hago para disfrute personal.
EliminarMe alegra tu sorpresa, pero mirá que un día puede suceder que la sorpresa sea: 'cómo pudo haber escrito esta m... este tipo'. Puede pasar.
Un fuerte abrazo, Luis.
Jajajaja! es el riesgo que corren los intrusos... ayer que lo leí me dejaste ¿¿¿??? pero hoy me resulta más claro, por ese lado. Que no tiene por quedar claro, pero viéndolo así es bastante gracioso para el lector, mientras que es muy incómodo para el prota. Es como cuando el otro día aparecí en el laboratorio de Madame Curie, resolví el asunto del radio, pero muy destanteada y hasta molesta, me negué a presentarme en lo del Nobel...
ResponderEliminarBesos muy divertidos!
A veces sucede, querida Sara, basta con dejar reposar el texto unas horas que ya queda horneado a la perfección... o algo así.
EliminarLo de no haberte presentado al Nobel, ya se lo dije a varios, me pareció una tontería suprema.
Un beso muy grande.
Ya debes perdonármelo... Creí que me sentiría muy incómoda hablando sueco, pues nunca lo había pronunciado, a pesar de tus clases que tan amable me diste, era más propio y cortés en sueco, que pronunciar el discurso de agradecimiento en francés. Sin embargo lo guardo, porque me costó varias noches redactarlo, y como única evidencia de mi intrusión. Cómo decirles que andaba detrás del uranio cuando encontré el radio. Les iba a decepcionar la verdad. Esperaban mucho más.
EliminarKyssar, min medbrottsling!
* Ha, ha!
en la escena, actor, cantante o músico experimenta una ficción que resuelve por su arte o definitivamente no lo hace...
ResponderEliminarese papel artístico la más de las veces es un otro yo que tuvo la impostura de meterse en cuerpo y alma
siempre un gusto, un abrazo
Y a nosotros con las letras también nos pasa, ¿no te parece?
EliminarUn fuerte abrazo, estimado Omar.
Achei muito interessante sua história, esquecer-se e ainda assim continuar, como é possível conseguir?
ResponderEliminarAgradeço sua visita no meu blog, desejo uma ótima sexta feira, e se puder me faça mais visitas, serás bem vindo e sempre retribuirei os comentários quando tiver tempo. Beijo
http://maybe-i-smiled.blogspot.com.br/
Com imaginação, claro!
EliminarValeu mesmo, Lari.
Beijos.
Un público en una platea vio salir al maestro.Éste se quedó en blanco, miro alrededor, perdido, y cuando una artista de túnica blanca le tomó del brazo, y le sacó afectuosa del escenario, miró sus manos, que apretaban una batuta. La suya.
ResponderEliminarTenían gotas de sudor, cuando en el camerino, una partitura se abrió sobre sí misma, se dispuso a volar entre el espejo y los afeites, mientras una música le iba entrando por la nariz.
Respirando entre pentagramas quedó dormido, entre los aplausos que venían del auditorio. Y no quiso despertar .
Por un decir. Me gustó. Un beso.
Y cómo iba a querer despertar si sobre el escenario estaba el verdadero él, ejecutando la obra como nunca, esa noche fue excepcional, yo aún la recuerdo.
EliminarTú puedes decir lo que quieras, Albada, y si un día tienes ganas, hasta modificamos el texto original a tus aires.
Besos grandes.
El verdadero él, sudaba profusamente, tras arengar el último compás justo antes de echarse sobre el solista, que acaba de elevar su arco, sobre un chelo vibrante aún.
EliminarLos aplausos eran tan atronadores que desde el otro lado de la vida los puso escuchar.
Como dijo la prensa porteña, no se olvidará una interpretación tan excelsa, por más veces que se represente "La vida en clave de sol", allegro ma non tropo. Para violonchello y orquesta. Del Maestro Xavier Yagón.
Como bien recuerdas, Humberto. Un beso grande para XY, y otro para ti.
Si quieres podemos intentar una novela a cuatro manos, Albada, ¿quién te dice que usando un pseudónimo no convirtamos el resultado en un best seller? Te propongo nombres: Stephen Queen, Carl Grisham, Danielle Iron..., luego tú me dices.
EliminarTan perdida no me sentí nunca, qué desconcierto de concierto ;) besos, Lobo!
ResponderEliminarBueno... en cierta forma es una pena, yo sí me sentí así de perdido, pero no fue en un escenario y frente a moles de personas, sino frente a una en... Bueno, me da vergüenza seguir.
EliminarMuchos besos, Fedora.
Lo mejor hubiera sido que el cantante se hubiese encontrado allí en pijama en medio de la multitud. No sé por qué pero es algo que he pensado que me podría ocurrir en alguna ocasión. Un fuerte abrazo y buen fin de semana Humberto.
ResponderEliminarMientras no te ocurra en alguna de esas bellas festividades que nos cuentas en tu blog...
EliminarUn fuerte abrazo, Pepe.
Es lo que tiene tomar sustancias estupefaccientes antes de salir al escenario jeje,
ResponderEliminarBesos
Pero si fue apenas una pastillita celeste que me dieron antes de subir, dijeron que se llamaba Viandra, Vilgra, Viangra, algo así. 'Vas a estar al palo', fueron las palabras textuales de quien me la dio.
EliminarPerdón ;)
Besos.
Acabo de leer a Cronista Imaginario, apasionado de la música, y al leer esta entrada tuya, pensé si al igual que sus protagonistas, de carne y hueso, el tuyo no estaría "fumao".
ResponderEliminarHumberto, saca cinco minutos y pasa por lo mío. Tengo un relato que me gustaría leyeras. Gracias.
Tendría que ser algo muy potente lo que fumó, porque si no... No sé, veo que muchos se imaginan al tipo drogado, ¡mira si estaba sufriendo un ACV! Mal pensados...
EliminarLuego paso, Alfredo, lo prometo.
Un abrazo.
Ay sí me he reído al principio de tu relato, la situación puede resultar angustiosa en un momento, y eso puede provocar o pánico o esa risa tonta que a veces ( o al menos a mí) nos da a los humanos cuando nos quedamos en blanco. Luego uno reacciona y el único que se da cuenta de ese agujero negro es el que lo vive.
ResponderEliminarPero voy al grano y resumiendo
El arte es pura improvisación, luego viene la copia del arte, los duplicados o los multiplicados . Tu en ese momento fuiste artista .. y lo seguirás siendo cantando o escribiendo
me voy con una sonrisa ( recordando un parto jajajaja, perdona)
Un beso enorme
¿Te ríes del relato o de mi parto de nalgas?
EliminarBueno, ambas cosas merecen una buena risa.
Muchas gracias por tus palabras y por tu buen humor.
Más besos enormes.
Humberto Emocionante relato feliz fin de semana
ResponderEliminarMuchas gracias, José Ramón.
EliminarBuen fin de semana para ti.
Un abrazo.
Impresionante relato que me ha tenido en vilo hasta el final, aunque quedó ahí en suspense sin saber si el protagonista recupero la memoria, ese agujero negro que le sirvió para improvisar tan divinamente, con lo cual se ve que era un verdadero artista.
ResponderEliminarMe ha encantado Humberto.
Un abrazo.
Por qué no pensar que no tenía que recuperar su memoria, que estaba intacta sólo que no era ése el lugar donde debía estar... digo, es una opinión más.
EliminarBueno, también puede ser que fuera un buen artista, eso no queda descartado.
Un abrazo, Elda.
Es posible caminar entre dos orillas, suele pasar sobre todo cuando vamos algo desconectados del mundo y conectados en otro no menos real e incesante.
ResponderEliminarSaludos.
Creo que me pasó más de una vez, la única que recuerdo vivamente es cuando rendí el examen final de la materia más difícil de mi carrera, no era yo, pero tampoco dejaba de serlo. Muy extraño.
EliminarUn abrazo, Jorge,
Pero qué momento!!! Ainsss amigo, qué gran parte de verdad y que gran parte del interior de las personas. Sabes navegar con tanta facilidad, por entre y por fuera...
ResponderEliminarMagistral!!! Me ha encantado.
Abrazossss
Muchas gracias por tus amables palabras, Beatriz, me alegro que te haya gustado.
EliminarUn beso grande.
De nuevo por tu casa, viendo las visitas que nos dejas. Siempre un placer.
ResponderEliminarSaludos.
VOY A DECIR LO QUE PIENSO, QUE ES MUY SANO POR CIERTO.
EliminarAQUÍ TENEMOS UNOS DE ESOS TÍPICOS COMENTARIOS EN LOS QUE SE NOTA QUE LA PERSONA NO LEYÓ EL RELATO. AMIGO, TODOS SE DAN CUENTA, NO HAY GENTE TAN TONTA, SI HASTA PUEDES SALIR MÁS AIROSO DICIENDO 'ME GUSTÓ' O 'NO ME GUSTÓ', PUES INCLUSO MINTIENDO, A UNO LE QUEDA LA DUDA DE QUE HAYAS LEÍDO. PERO ESE DE NUEVO POR TU CASA... TAN OBVIO, TAN LAVADO.
TE ASEGURO QUE NADIE NECESITA NI MERECE SEMEJANTE ENGAÑO, NO SÉ, POR AFECTO O POR RESPETO A LA INTELIGENCIA MEDIA, AL MENOS.
AMIGOS QUE SE ENCUENTREN CON ESTA CLASE DE COMENTARIOS, NO PERMITAN QUE ALGUIEN TAN SIMPLE QUIERA TOMARLOS POR TONTOS, Y SI SE BORRA COMO SEGUIDOR O NO VIENE MÁS... BRAVO, TENEMOS UN HIPÓCRITA MENOS ENTRE NOSOTROS.
Jajajaja..
EliminarYo visito muchos blogs y ya vi que hace lo mismo en todos lados cuando es una mujer a vecs dice algo mas seductor al final pero copia y pega.
Tú te animas pero imagínate los que tienen pocos seguidores no van a querer perder un número en su lista, jajaja.
Te has levantado con mal genio o eres asi de sincero??? Ojala todos pudieamos decir lo que pensamos.
Ainsss Humberto!!!
Perdón por el anonimato pero mucha gente que te lee me conoce y no me decido a cometer un sincericidio, todavía!
EliminarPersonas así no las quiere nadie, pero lo perdonan, le agradecen como si el tío fuese a leer la respuesta, un seguidor es un seguidor, macho.
Abrazo.-
Esto si que es auténtica creación. Dib. Lo siento posible. Sueño, vigilia o un paseo momentáneo por un mundo paralelo?... Solo tú, querido amigo.
ResponderEliminarMi beso mas admirado
Un beso muy grande, querida María Socorro, siempre eres tan amable conmigo.
EliminarHace unos días hablaba de ti con una bloguera de Buenos Aires, muy bien por cierto.
Mi beso más cariñoso.
Pues parece que nuestro protagonista ha tenido un colapso mental en que no sabía ni quien era, el pobre, espero que diera con el camerino, ¿qué habrá ocurrido al mirarse al espejo...? Hum...
ResponderEliminarDe Peter Gabriel me encanta The feelings begins, esa música me hace viajar, te lo aseguro.
Un relato entretenido.
Un besote.
Desde el mundo de los personajes, me contaron que se metió en el cuarto de los productos de limpieza, que se colocó el uniforme y luego salió a limpiar las instalaciones, después no supieron decirme más. Te aseguro que estoy muy intrigado, Sete.
EliminarAh, una canción de 'Passion', sí muy climática. Para mí hay 3 Peter Gabriel, según la época, me gustan todos, pero el que más es el de su primera época, era más jugado, más osado.
Un beso grande.
Eso es lo que me pregunto yo muchas veces, qué hago aquí en tu blog, si la mayoría de las veces me encuentro perdida en tus letras, como en estos momentos que acabo de leerte, estoy pensando en todo lo que creo que dices sin decir, pero al final me quedan un montón de incógnitas ¿? pero hay una cosa que es muy cierta, me fascinan todas tus historias.
ResponderEliminarBesitos
Querida María Rosa. creo que no deberías preocuparte demasiado por todo lo que quiero decir, muchas veces hasta yo mismo no descubro los secretos de un texto, más de una vez me han dicho 'esto que dices aquí tiene que ver con...', y yo me doy cuenta de que tienen razón, que es algo que se me escapó.
EliminarMe parece que cada uno tiene la respuesta para cada relato, hasta los más sencillos tienen su complejidad y, por el contrario, lo más difíciles son comprensibles a simple vista.
Sea como fuere, agradezco tus visitas y comentarios.
Un beso grande.
muchas gracias Humberto, eres adorable.
EliminarY ahora vas a hacer que me ponga colorado ;)
Eliminar
ResponderEliminarLovely blog! :-)
would we follow each other on gfc and bloglovin? Maybe also on Instagram and twitter (widget on my blog), what do you mean? Regards from germany
.•. My Beauty Blog .•.
Let me know ♥
Kisses
What do I need from you? No deal, my darling, try to do that kind of... business elsewhere!
Eliminarintruders happy in the dark
ResponderEliminarY a veces nosotros también, no?
Gran abrazo.
¿Ser intrusos o ser felices en la oscuridad? O ambas cosas tal vez...
EliminarUn fuerte abrazo, Dany.
Ahora que no nos oye nadie... yo tengo bastantes lapsus de esos. Ojala saliera tan bien como tu personaje... o tu relato.
ResponderEliminarLo bueno de contar esas cosas aquí es que nadie las oye, Miguel Ángel. Bueno, lo importante es que en algún momento recuerdes quién eres, después se verá.
EliminarUn fuerte abrazo, amigo.
Declarar amnesia y salir bien librado y con la suerte de la entonacion perfecta, do, re, mi, etc, a veces resulta. Saludos
ResponderEliminarposdata:
yo me hubiera ensuciado del miedo, así fuera sueño.
Y yo que te imaginaba mucho más osada, no cualquiera viene aquí y me maltrata como tú lo haces a veces ;)
EliminarEs que nadie se dio cuenta de que se había olvidado la letra, si salió todo más que bien, bueno, hasta que llegó al camerino, pero ese sería otro cuento.
Un beso.
Creo que estamos en un momento de improvisación, de lapsus mental, no todo el mundo puede reaccionar así, salir del paso es lo importante, no importa qué... Me encantó el cuento que tiene varias lecturas. Muy muy bueno, Humberto, como todo lo que escribes. Disculpa mi ausencia, sabes que no te olvido y vuelvo a ti. Un beso.
ResponderEliminarMuchas gracias, Julie, no tienes que pedirme disculpas, imagínate que tuviera que hacerlo yo, que a veces demoro meses en dar toda una vuelta por la lista de amigos para completar las visitas.
EliminarSiempre feliz de que vengas cuando quieras y puedas.
Un beso grande.
Asombrarse de uno mismo, por que al sentirnos perdidos encontramos un camino que nos hace salir adelante "sea como sea" y en ocasiones aun sin pensar en ello, podríamos decir que en la vida nos perdemos a menudo, pero siempre avanzamos aunque nadie nos indique el camino.
ResponderEliminarBesos, que disfrutes de un hermoso domingo!!
Me parece que este relato refleja (exageradamente, claro) situaciones que vivimos cada tanto, pero como bien dices, lo importante es salir adelante sin bajar los brazos jamás.
EliminarUn buen domingo para ti también, FG.
Y besos.
Oh! por favor, no me extraña naada de nada que ESTE TEMA te haya inspirado esta maravilla, si Peter Gabriel te leyera seguro que diría ¡justo! justamente esto que has escrito HUMBERTO es lo que sentí aquel día en el que por primera vez me salió esto:))
ResponderEliminarMuuchos besoosssss y montón de gracias, me has hecho sonreír imaginado a Peter Gabriel tal cual cuentas... a veces haces cosas realmente geniales ¿lo sabes verdad?
... feliz domingo, artiZta:)
Es un sentimiento muy particular que tengo por ese músico, recuerdo que yo era un crío y me encantaba recibir fotos de él subido a escena con Genesis, disfrazado de zorra o de flor, de anciano o de jardinero. Hasta que un día leí la letra y la historia de un disco que se llama "The lamb lies down on Bradway" y dije 'así quiero ser yo, así quiero tener mi mente de libre'. No sé si lo logré, pero siempre que quiero darme fuerza dispongo del youtube donde aparecen cosas de él que son de aquella época y todavía me sorprenden.
EliminarEn fin... feliz domingo querida María.