Era de madrugada y ya llevaba 26 horas seguidas frente a la computadora jugando al We all hate this fucking world III, pero a Fede no le importaba el tiempo, si lo comento es porque soy un narrador con un insoportable espíritu de agrimensor. Lo cierto es que ya casi terminaba la pantalla 30 del nivel 18, el máximo en este juego, sólo le faltaba enfrentar al Great Killer y atravesar la Golden Gate. Este nivel no le había parecido demasiado difícil, todo le resultaba familiar. 26 horas consecutivas en un juego virtual es mucho, podrán decir, pero Fede ya había estado mucho más tiempo sentado frente a la pantalla.
-No es tan grave, después de todo, por Dios, cómo es la gente, ¿por qué no se fijarán en sus propios culos?- decía a veces la madre.
Apenas 2 metros virtuales lo separaban del final, cuando le salió al cruce el Great Killer que, extrañamente, no dirigió su arma al player de Federico, sino que la apuntó hacia un lugar fuera de la pantalla, directo a su cabeza real. La explosión fue muy verosímil.
Estimados amigos:
ResponderEliminarMuchas gracias por los comentarios para “Dos amigas”. Les quiero contar que este escrito tuvo 613 visitas el primer día que fue subido y unas 1400 en total, lo que marca un récord para este espacio. Sólo tengo palabras de agradecimiento para los que me acompañan en esta hermosa aventura con las letras.
“Game over” es un texto que ya vio la luz en el 2010, es su segunda oportunidad, digamos.
Espero que estén teniendo una buena semana.
Les dejo un gran cariño.
Humberto.
Hola Humberto como siempre tus textos son muy interesantes, ante de ir a descansar pase a saludarte,.
ResponderEliminarBesos buena semana
Este "Game over" es casi gore en su estética sugerida e imaginada, pero creo que querías criticar la vacuidad y la frivolidad de gran parte de los miembros de esta decadente sociedad de consumo.
ResponderEliminarSigo admirando tu talento, Humberto.
Recibe desde Andalucía mi más cordial saludo.
ROMI: Muchas gracias, qué bueno que hayas sido la primera esta semana. Besos.
ResponderEliminarWUNDERMAR: Gore o Splatter, podría decirse, pero bien te has dado cuenta de que intento otra cosa más que mostrar sangre. Un gran abrazo.
Aquí son las 2.00, mejor voy a acostarme, a ver si...
Está muy bien. Recuerdo que no hace mucho un chaval corto alguna cabeza con una catana que le habían regalado(buen regalo) y se achacó a un videojuego. Pero esto es real.
ResponderEliminarSalud.
UUfff es una patada a los dientes, menos mal que yo sólo juego al tetris!!
ResponderEliminarUn escrito con fuerte moraleja, diferente, sin dudas.
Besotes.
Sabri.
Guauuuu!
ResponderEliminarLinda manera de irme a dormir!!! JAJAJAJA!!! Y eso que los analistas recomiendan ver o leer cosas livianas, para que el inconciente guarde esas banalidades y no tengamos pesadillas... JEJEJE!
Ahora en serio. Excelente post.
La insanía del chico,
la insensatez de la madre,
un arma en la casa...
Y todo condensado en un texto
que te propina un buen cross
en el mentón.
IMPECABLE Humberto! Muy bueno!
Big kiss for you and sweet dreams my dear! :)
¡Impresionante!
ResponderEliminarNadie puede imaginar hasta donde pueden llegar las obsesiones.
Que todo lo que ayude a la reflexión sea bienvenido.
Un abrazo
Da que pensar
ResponderEliminarGruesome.
ResponderEliminarMuy bueno, medias... femenino... encerrado... singular... y todo se va a la mierda... inadaptación a modo de vida "normal"... no sé si se podría rizar aún más el texto para que la evacuación fuese más brutal... creo que no, que bastante tenía la criatura de mamá...
ResponderEliminarMe gustó mucho... gracias por el chivatazo de la publicación ;-) Bss...
Humberto!
ResponderEliminarYa sabes que este tema (no el de los videojuegos sino el del desparrame cerebral) me gusta, jaja.
Por lo tanto celebro que en momentos esporádicos saques a relucir tus mortales armas. Y por cierto, escuché el percutor al impactar con la cápsula iniciadora!
Impresionante!
Abrazo!!
Estimado Humberto:
ResponderEliminarTras un agradable paseo por tu blog, he de decirte que me han fascinado tus escritos. Están impregnados de una sabiduría que no se adquiere con el aprendizaje, sino que se nace con ella. Tienes un don innato para la pluma.
¡Un abrazo!
Parece, Sr. Dib, que la realidad virtual puede ser muy real.
ResponderEliminarUn abrazo
Octavius Bot
Jajajaja un nuevo giro para un relato, siempre sorprenden tus finales, un saludo allende los mares
ResponderEliminarUfff que extraña manera de comenzar un día!!! suicidio !! se acabó el juego!! y de una manera siniestra.
ResponderEliminarGenial querido Humberto !!! como siempre nos sorprendes, eres único!!
Un besazo de buen miercoles que sea bien lindo para tí
Algo así, como si nada hubiera pasado... Está genial tu texto Humberto. Me ha gustado, como siempre la forma de exponerlo. Felicitaciones amigo.
ResponderEliminarMe ha encantado la historia, bufff me ha dejado helada ( soy jugadora de Call of Duty a veces solo ehhh, y que no me suceda igual)
ResponderEliminarGracias por tu visita a mi blog, porque te parezca interesante (algo que me deja alucinada jajaja) y sobre todo por quedarte.
Biquiños.
Saludos Humberto Bien, el que cuenta una historia, no real: tiene
ResponderEliminarla potestad de acavarla como guste,con la intencion de dejar entrever, algo mas profundo.
Pero hay algunas historias que parece que lo real de lo irreal se dan de la mano un abrazo
Humberto, admiro la audacia que es proclama y que tu relato bien responde a ella.
ResponderEliminarEs cierto que hay una quebradiza frontera entre lo absurdo de las casualidades y la devoción desmedida por la frivolidad. Eso me ha dado a pensar tu texto que fascina y atrapa.
Un abrazo.
Hola amigo, interesante tu texto,como siempre mi admiración. Saludos.
ResponderEliminarTremenda la adicción a los video juegos. Y tremendo el enfoque que le has dado a este post. Impresionante.
ResponderEliminarUn abrazo.
Intimidante relato, miedo me da jejej, magnífico como siempre.
ResponderEliminarPero ahora si me permites vengo a que me aceptes un regalo, sería un honor para mi que así lo hicieses.
Ve a mi blog que te está esperando, eso sí tienes 3 reglas que cumplir, que nos digas 3 "mentirillas" tuyas, 3 verdades y que pases este premio a otros 10 blogs amigos. Muchas gracias de antemano por aceptarlo.
Besines
Es duro pero esto lo enlazaría con los peligrosisimos juegos de rol.
ResponderEliminarLlega un momento que distinguir la realidad de la ficción para un niño es dificil.
A veces, en otros temas también lo es para un adulto...
Bueno que me ha encantado y particularmente porque aprecio una crítica clara a este tipo de jueguecitos.
Un beso.
Oi, Humberto.
ResponderEliminarTodo vício é ruim.
"Sua mente sua lente.":)
Bjos
Hola Humberto. Me ha encantado tu blog y tus textos. Este me parece genial, muy negro y con un mensaje muy real.
ResponderEliminarTe agregaré en mi blog en mis "enlaces amigos".
Un saludo.
Mejor jugamos al parchís.
ResponderEliminarClaro...y después de terminar con el fucking world que quedaba.
ResponderEliminarLa educación en la desesperanza no deja muchos lugares. Me gusto la delicada expresión de la madre y la ironía sobre la inteligencia del padre.
Beso
¡Cómo me gustó! Pequeño gran texto con contenido muy concentrado. Enhorabuena Humberto.
ResponderEliminarUn saludín desde el otro lado.
No me extraña la cantidad de visitas que tuvo, es muy bueno, la temática y está muy bien narrado. Le voy tomando el gusto a los microrrelatos, quizás me anime a alguno, no sé...
ResponderEliminarMuy bueno, como siempre
Besote Humber!!!
Veo una invitación a la reflexión en el texto. Me induce a pensar en mil cosillas que se arremolinan en nuestra sociedad. Curioso el registro empleado, muy curioso.
ResponderEliminarUn saludo!!
Definitivamente agrimensor. Números y medidas por todos lados, jaja. ¿Porque la gente "guarda inteligentemente" armas en sus casas?. Abrazo, Humberto.
ResponderEliminarHola Humberto, tremendo relato!
ResponderEliminarMe pone un poco triste saber que verdaderamente haya chicos que estén al filo de ese peligro.
Tu relato es muy bueno y me ha entretenido mucho, espero que también pueda ser útil a alguien para que tome conciencia del peligro de un arma en el hogar.
Un abrazo.
Hola Humberto
ResponderEliminarMuy interesante el texto. No creo que sea tan irreal. Los juegos electrónicos crean adicción.
Algunos de esos juegos parecen simuladores para entrenar asesinos...
Beso
Un post que moviliza, esencialmente a pensar y darle una cachetada a la estupidez.
ResponderEliminarhasta donde pueden llegar la obsesiones no?? Paso a dejarte un beso grande, un placer visitarte! saludos y un fuerte abrazo
ResponderEliminarTodo parece indicar que fué la única manera de poderse curar esa adicción que tenía al "Game Over" e hizo honra al nombre de éste.
ResponderEliminarRecibe muchos saludos.
Rubí:
ResponderEliminarTu blog esta lleno de inspiración, para recorrelo sin prisa, este relato es apasionante! te felicito Humberto!
Sandra (San TLF)
ResponderEliminarImpactante, realmente te atrapa desde el inicio hasta el final!gran capacidad y talento tienes Humberto! el Blog, es maravilloso, uno podría estar leyendo toda una tarde!
Muchas gracias a la gente de "El Taller Literario del Face" (facebook), un espacio en el que ningún escritor debería faltar. Lo recomiendo con absoluta vehemencia.
ResponderEliminarAbrazos.
Humberto.
Un final de cine. Felicidades
ResponderEliminarSaludos
Un relato lleno de realismo, porque cualquier abuso es malo y evidentemente los videojuegos para más inri los violentos pues por supuesto lo son.
ResponderEliminarHay muchos adolescentes (nativos digitales) que se obsesionan por este tipo de juegos y hay que tener mucho cuidado porque tu relato es real, solo hay que escuchar las noticias y no es raro escuchar que un chaval hizo una masacre en una guardería o en un instituto ...
Un beso. Amelia
En este relato observo que todas las cosas, aunque sea ocio, llevado al extremo de la pasiòn termina rompiendo toda diversiòn.
ResponderEliminarun saludo
fus
Que locura.. Por como contás, visualizo siempre lo que escribís. Te admiro. Un beso grande! Mas éxitos!
ResponderEliminarMuy bueno amigo, crudo y duro, que decirte que ya no sepas¿? tus textos siempre atrapan, “impactan”…un placer visitarte ;-)
ResponderEliminarBsos
Muy bueno, jeje huele un poco a alucinación o trastorno bipolar.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los videojuegos son una buena diversión pero en manos de niños pueden ser peligrosos si no son los adecuados.
ResponderEliminarEstupendo post Humberto. UN ABRAZO.
Muy bueno, me alegra jugar una hora a la semana (como mucho) casos así no son del todo ficción.
ResponderEliminarEnhorabuena, como siempre propones algo diferente e interesante.
Un saludo!
www.jorgemaseda.blogspot.com
Es un poco splatter...escribes muy bien! Chau, Arianna
ResponderEliminarCACIL (TLF)
ResponderEliminarAmigo, tus letras impactan, logras deshacer situaciones, unirlas, volverlas a barajar para transformarse en estos relatos que son una verdadera joya! gracias por tanto placer que me da leerte.
hola humberto,es son una seríe de trabajos? o es una novela?....mi pregunta va, a que como casi no pasa-recien ayer me sacaron los puntos-por no hacerme daño, ya que mucho tiempo sentada, no va,caminar si va...no lo he leído antes...
ResponderEliminarquiero expresar mi agradecimiento,con un premio,que te mando por correo,espero sea de tu agrado,y si no no lo pones, y listo,
escritor,de un nivel muy alto de escritura!
un abrazo,muchas gracias por compartir
lidia-la escriba
http://www.deloquenosehabla.blogspot.com
enlace a mi blog
Hola humberto una historia de película es tu texto"Game Over" Dicen que las armas las carga el diablo.
ResponderEliminarEsto que le paso al chico , por desgracia pasa en la vida real.
Un abrazo de MA para ti.
Un final de virtual realidad.
ResponderEliminarConfieso que me gusta jugar, pero bueno, no muchas horas.
Un saludo enorme.
WOOOW !! me encanto el cuento! *-*
ResponderEliminarmerece su segunda oportunidad en el ciberespacio xd
mas me gustaron las cifras!! es un excelente record :)
besotes humberto!
whuoo que texto...!!! esta exelente eso de lso videojuegos no es lo mio,.La manera que lo escribes lo ase ver interesante
ResponderEliminarSalUudoOss
Ha sido un honor qu eme visites y te hagas seguidor de mi humilde blog
ResponderEliminarSi me aceptas me quedo contigo
Un saludo
¡Vaya final de juego! La crítica es demoledora y acertadísima.
ResponderEliminarUn abrazo
Quedé sin palabras...
ResponderEliminarSinceramente no imaginaba el desenlace fatal.
No escribes bién, lo haces EXCELENTE!!!
Saludos Humberto.
Un final que da bastante que pensar y que no es tan virtual como parece. Como siempre, los has bordado.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.
Muy interesante tu relato Humberto! Me he quedado de una pieza, no esperaba el final :) Muchisimas gracias por tu visita y por quedarte, es todo un lujo tenerte por el blog, agradezco tus lindas palabras :)
ResponderEliminarUn abrazo y ya nos vamos leyendo, yo también estoy por aqui!! Un saludo!
Bea
Gracias por tu visita y seguimiento a mi blog. Como ves, yo tambien me he hecho seguidora del tuyo para estar al dia de tus publicaciones y disfrutar de tus escritos y relatos como este que he leido de Game Over, que me ha parecido¡fantástico! y ahora que nos conocemos aunque sea virtualmente, seguiremos en contacto.
ResponderEliminarUn abrazo
Felicidades,muy bien explicado,me meti en la acción.
ResponderEliminartere
Relato de gran ingenio y con una buena dosis de pedagogía frente a ese aislamiento juvenil de los vídeo-juegos.
ResponderEliminarSaludos, y un abrazo.
Interesante texto, una buena vuelta de tuerca, me gustó, saludos
ResponderEliminarHola Humberto!!
ResponderEliminarMuy buen relato y con una moraleja,que dá que pensar en la sociedad actual,en la que nos movemos.
Te estoy muy agradecida por venir a conocerme,me alagas,estoy viendo lo que escribes y me gusta mucho,espero que tengas mucha suerte con el libro y consigas tu meta.
Espero seguir viéndote en mi blog,si quieres,bueno yo no soy escritora ni nada,pero me encantaría saber tu opinión,sobre las cosas que escribo,son,como diría yo,muy de andar por casa,me gusta compartir mis pensamientos,mis sentimientos,es todo muy sencillo,ya lo has visto,pero es mi rincón donde puedo expresar mis emociones.
Gracias de nuevo
Un abrazo Humberto
¿Qué mejor cosa que escribir lo que a uno le plazca, Estrella?
ResponderEliminarEstamos todos en una gran comunidad que se alimenta, crece y camina con hermosos pasos.
Un beso.
Humberto.
Hola Humberto.
ResponderEliminarUna magnifica narracion con un texto inteligente y un final sorprendente.
Te aseguro que me resulta muy facil imaginarme los escenarios de tus historias, como si directa o indirectamente hubiera participado en ellas.
Te aseguro que en esta ultima, mi papel no fue el de protagonista.
Un abrazo, amigo.
Ricard
Un relato real de muchos jovenes que se pasan la vida delante de los ordenadores perdiendo la facultad de vivir una vida real y mucho acaban como el de tu historia.
ResponderEliminarUn placer lerte.
Primavera
A seguir sumando visitas ya que es estupendo
ResponderEliminarUn besote
Se ve que esa madre no podía ver su propio culo... Conocí un caso en que la madre encontró a su hijo así al volver, había salido 5 minutos porque no lo querían dejar solo, pero, claro, el arma estaba tan inteligentemente guardada como la de tu relato.
ResponderEliminarEsta vez lo leí como una historia, sin querer reflexionar demasiado si es el huevo o la gallina. Y me atrapó nuevamente.
Es un buen mensaje, a pesar de que toque a tanta gente conocida o a tantos que conocerán a alguien tan dependiente y que no alcanza a darse cuenta de que desperdicia su vida viviendo locuras de otros, sueños de otros, vidas de otros frente a una pantalla.
Excelente observación de la realidad, que nos traspasás como ese disparo.
Eu sou muito romântica em tudo, mas gosto igualmente das verdades ditas em forma de contos. Como gosto deste tipo de leitura que no final das contas tem muita poesia e veracidade!
ResponderEliminarUm beijo enorme, poeta!
26 horas consecutivas jugando frente a la pc; sí, se ha sabido de casos así que han terminado en epilepsias, convulsiones y muertes fulminantes; sobre todo en púberes adolescentes. la muerte le iba a llegar de una forma o de otra. buen relato.
ResponderEliminarpostdata: carina me dice que le ha gustado leerte en este post; pero que debido a sus molestias en cuanto a su salud que ha tenido en estos últimos días, no ha tenido la disposición de ánimo suficiente como para escribir. te envía saludos.
Muchas gracias por avisar, Draco, espero que Carina se mejore pronto.
ResponderEliminarUn gran cariño.
Humberto.
Un relato de terrible dureza, pero muy cierto, creo que todos coincidimos que estas cosas pasan en la vida real.
ResponderEliminarUn besote.
Caro
Hola Humberto
ResponderEliminarTraspasar los límites siempre tiene sus riesgos. Y pensar que hay quienes sostienen que estos juegos de violencia no influye en el comportamiento del individuo.
Besitos
Muy bueno Humberto. Gracias por pasar por mi blog y comentar, me llevo el tuyo a mi lista de amigos.
ResponderEliminarabrazos totales.
Muchas veces uno se pregunta que hay en esa avidez de avanzar pantallas, tras pantallas.. en algún que otro caso se tratara de esto, una búsqueda real del "game over"..
ResponderEliminarUn gusto leerte, seguiré por estos lados..
Saludoss
Bes
Buenísimo! Siempre me río con alguno de tus finales y luego me da ganas de llorar, por Dios!!! me lo llevo para leérselo a mis hijos, si me lo permitis!otra vez estoy rondando. Un bso Humberto!
ResponderEliminarHi, Humberto
ResponderEliminarWhat an interesting story you said! It is so much realism in your story.
Regards
Un juego muy aditivo. La realidad supera muchas veces a la virtualidad. Una forma brusca de acabar la partida. Después de legar a la última pantalla del nivel más alto, que aliciente hay.Final de partida, muerte súbita.
ResponderEliminarUn abrazo.
.UF..SIEMPRE EXCELENTE TU NARACIÓN...,QUE POBREZA MENTAL..TANTO TIEMPO FRENTE A UNA MÁQUINA BOBA..,YO DE ESOS JUEGOS CERO..SÓLO FUTBOL,AUTOS ,JAJAJ,SOLO HOMBRES EN LA CASA Y CON ESOS GUSTOS...PERO EL CONSUMISMO Y LA FRIVOLIDAD POR ESOS COSAS NO LAS TOLERO...,DEMASIADO QUE HAGO ESTO..JE
ResponderEliminarBESOS hUMBER
Hola Humberto
ResponderEliminarleo todas tus historias. Todas tienen muy buena calidad, ésta de GAME OVER no se queda atrás. Solo corregirte, si no te molesta, dos cositas: agrimensor significa profesional de medir los terrenos y solo se puede emplear en esas circunstancias, no sé qué querías decir con ello. Y al final, la primera frase del último párrafo, yo no pondría "en el medio" más bien sería "en medio", ¿no crees?.
Espero no haberte molestado, me encantan tus relatos, son excitantes, amenos, sugestivos, muy originales, y eso es importante.
un abrazo.
Nurya:
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras, siempre son bien recibidas. Paso a explicarte tus señalamientos:
Sé de qué se trata ser "agrimensor", creo que el prefijo "agri" lo dice todo. Es una licencia poética a ciertos comentarios que señalan que aparecen muchos muertos en mis textos, una forma de decir que "debo medir tierras" para ubicar los cadáveres. Una alegoría, mala tal vez, pero apenas eso.
En relación con "en el medio de". Es un texto escrito desde las expresiones de Argentina, posiblemente esté tan mal como decir "lo puedo comprar" en vez de "puedo comprarlo". Para darte un ejemplo, en los miles de libros que llegan de España puede leerse "voy a por ello", pues bien, si alguien lo dijera de esa forma en cualquier país de América Latina, lo mirarían extrañados a la cara, pues por estos lares se dice "voy por ello", sin la preposición "a". Son estilos, modismos, regionalismos.
Ni hablar del "le" y el "lo".
No te creas que no pensé miles de veces cómo expresarme, a qué público apuntar, pues vivo en un país que tiene un idioma muy particular que se denomina "español del Río de la Plata" y que sólo se constata en Argentina y parte de Uruguay.
Sea como fuere, tu comentario me permite tener un mayor contacto contigo y compartir algunas rarezas.
Lo cierto es que jamás me molesta una indicación, es la mejor manera de aprender.
Un beso enorme.
Humberto
Bueno pues enhorabuena por tu éxito por este relato de obsesiones.. breve e intenso.
ResponderEliminarun saludo
Hola Humberto !Aquí la que te "pone mala fama", pero siempre vuelve.
ResponderEliminarLa verdad es que lo que cuentas, en este caso, no puede calificarse de descabellado. Cosas peores ocurren en el mundo...
Me ha encantado la mamá, "qué maja"(diríamos aquí irónicamente), de las que no se enteran (o no se quieren enterar).
Un beso,
Humberto: Tengo la rara sensación de que Obama acaba de hacer eso, puede que su tiro rebote y le dé justo en medio de los ojos.
ResponderEliminarTodo por jugar a ganar.....La reelección.
Mi cariño: Doña Ku
Un texto lleno de interes bien llevado y terminado estupendamente!!!
ResponderEliminarUn beso, Humberto.
En el fondo, el abuso de estos juegos tan extremadamente violentos sí deja un agujero en la cabeza de quienes son atrapados por ellos, un agujero en el que incluso puede percibirse cierto olor a pólvora, el olor de ese "hate" ciego y absurdo. Un saludo.
ResponderEliminarHola Humberto! fue grato encontrarte en el blog del Tano. Saludos
ResponderEliminarYo juego solamente ajedrez. En mi caso mi madre me encontraría a la mañana jaqueada o tomando "mate" con el Rey... ;-)
ResponderEliminarun abrazo
Ufff que patadón tremendo! MUY BUENO!
ResponderEliminarla virtualidad del juego puede volverse la realidad de la destrucciòn; la realidad de las guerras nos muestran que -por suerte- no es cosa facil librar batallas solo apretando botones.
ResponderEliminarcomo siempre genial en tus historias.
un saludo
Blas
Me gusta el relato, tiene la fuerza de lo inverosimil, que de pronto se vuelve realidad...son muchos los que disparan virtualmente contra su propia cabeza y mueren de forma real...enhorabuena por tu blog...un abrazo de azpeitia
ResponderEliminarRealmente muy bueno
ResponderEliminarDisparar a las frustraciones y avanzar es el objetivo del solitario.
ResponderEliminarEres un crack.
Saludos transoceánicos.
Supongo que la madre fue la que disparó a Federico para que dejara de sufrir en el video juego infernal.
ResponderEliminarMientras leía estaba dentro de esa habitación por lo bien narrado que está este texto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Excelente Humberto.
ResponderEliminarNegro, negro este relato, decimos de la estupidez humana pero es que somos tan impredecibles… que cada uno reacciona de una manera distinta. Y que conste que no estoy justificándolo. Que bruto, después de esto no podrá volver a jugar…(lo siento hay que tomárselo con un poco de humor la realidad es muy dura la mayoría de las veces).Un besso
ResponderEliminarUN MINI CUENTO QUE ME MATÓ, TE DIGO LA VERDAD QUE YO PASÉ POR ÉPOCAS DE VICIO TOTAL CON LOS JUEGOS ONLINE Y TE QUEMAN EL COCO. SALÍA A LA CALLE Y SENTÍA QUE TODO ERA IRREAL, COMO SI ESTUVIERA ADENTRO DE UNA PANTALLA.
ResponderEliminarMUY BUENO PORQUE DEJA UNA MORALEJA Y PORQUE ESTÁ ESCRITO COMO UN MASTER (OF THE UNIVERSE) JE
CHRIS.
Uf! Y pensar que estas cosas suceden en la vida real.. la gente influenciada por un juego, me parece terrible. Pero bueno, de todas formas es muy bueno.. Me sorprendió que se terminara suicidando, no me imaginaba eso.
ResponderEliminarUn saludo para vos!
TU BLOG ES INCREIBLE X LA CONVOCATORIA.
ResponderEliminar¡Hola! como soy un pajarito muy curioso decido seguir las miguitas de pan...
ResponderEliminarEste post parece de novela negra, no me gustan los juegos de azar e impedí todo lo que pude que llegara a casa una playstation, me dejó la piel erizada.
Estuve curioseando y me gustó el blog, prometo regresar.
Un saludo afectuoso.
Por suerte mis hijas mujeres nunca se han interesado en la play , yo ni se como se utiliza , me corrió un escalofrío frente a tu final , dicen "las Armas las Carga el Diablo" no ? , yo mas bien creo que en los hogares donde hay armas y los hijos saben de su existencia el Diablo tiene un Título superior , "Padres".
ResponderEliminarBuen finde
Saludito
Cris//mujeresdesincuentay
OH! ... le ganaron el juego!!!!!
ResponderEliminarun beso
Que manera de perder en el videojuego.
ResponderEliminarte lo acabo de renviar por correo,espero llegue!
ResponderEliminarun abrazo
lidia-la escriba
Me gustó mucho, Humberto, como casi todos tus cuentos que conozco. En éste le das mucho realismo a través de tanto detalle en esa vida (única vida) de los juegos en que a veces se meten algunos chavales. Aunque también hay adultos ludópatas...
ResponderEliminarUn abrazo